En búsqueda de placeres, pero obtiene dolores y molestias. De la misma manera, busca explicaciones a través de una arquitectura de realidades inventadas.
En efecto, quienes desean placeres presentes se ven corrompidos por las molestias ocasionales que surgen. Aunque muchas veces no son culpables, se ven empujados por la culpa a abandonar sus deseos, sumidos en el trabajo y el escape de sus penas.
Algunos buscan en vano placer en medio de la dificultad, mientras otros escapan de dolores que en realidad son inexistentes, huyendo hacia una felicidad ficticia.
En efecto, quienes desean placeres presentes se ven corrompidos por las molestias ocasionales que surgen. Aunque muchas veces no son culpables, se ven empujados por la culpa a abandonar sus deseos, sumidos en el trabajo y el escape de sus penas.
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Algunos buscan en vano placer en medio de la dificultad, mientras otros escapan de dolores que en realidad son inexistentes, huyendo hacia una felicidad ficticia.
En efecto, quienes desean placeres presentes se ven corrompidos por las molestias ocasionales que surgen. Aunque muchas veces no son culpables, se ven empujados por la culpa a abandonar sus deseos, sumidos en el trabajo y el escape de sus penas.
Experimentar dolor significa avanzar hacia la felicidad a través de la adversidad
A menudo nos encontramos con situaciones que nos obligan a cumplir con nuestras responsabilidades y necesidades, enfrentando tanto placeres como molestias que no podemos rechazar. Así es como elegimos sabiamente nuestras acciones, optando por disfrutar de placeres más grandes o de soportar dolores adicionales.
En realidad, es un hecho bien conocido que muchas veces debemos aceptar lo que no podemos cambiar y enfrentar directamente nuestras responsabilidades, aunque esto implique trabajar con dolor.
Lista Ordenada
- En efecto, quienes desean placeres presentes.
- La fácil distinción y realización de tareas.
- Además, en ocasiones se nos presenta la libertad de elegir.
Lista sin Orden
- En efecto, quienes desean placeres presentes.
- La fácil distinción y realización de tareas.
- Además, en ocasiones se nos presenta la libertad de elegir.
Nadie busca conscientemente el sufrimiento, sino que lo evita en la medida de lo posible, buscando así evitar esas grandes penas que surgen sin razón aparente.
La fácil distinción y realización de tareas es una opción clara durante momentos libres, sin impedimentos que limiten nuestra voluntad de actuar según nuestros deseos. Estos obstáculos pueden ser superados sin problemas, permitiéndonos disfrutar de toda la felicidad y rechazando cualquier forma de dolor.
No hay imitación alguna. A menos que se demuestre lo contrario, se asume que se está trabajando arduamente para no caer en la tentación, asumiendo las responsabilidades incluso cuando resultan una carga.
En búsqueda de placeres, pero obtiene dolores y molestias. De la misma manera, busca explicaciones a través de una arquitectura de realidades inventadas.
Nadie busca conscientemente el sufrimiento, sino que lo evita en la medida de lo posible, buscando así evitar esas grandes penas que surgen sin razón aparente.
La fácil distinción y realización de tareas es una opción clara durante momentos libres, sin impedimentos que limiten nuestra voluntad de actuar según nuestros deseos. Estos obstáculos pueden ser superados sin problemas, permitiéndonos disfrutar de toda la felicidad y rechazando cualquier forma de dolor.
Deseosamente observo de dónde proviene todo este error nacido mientras disfruto de la alegría acusatoria y laudable, la totalidad de la situación agradable, esa misma que el inventor de la verdad y casi arquitecto de las vidas benditas dicta son explicables.
Sin embargo, nosotros acusamos con veracidad y justicia aquellos que lideran con encanto los voluptuosos presentes deleitados y corruptos, aquellos dolores y molestias que, de alguna manera, siendo capaces de evitarse, no son proporcionados por la codicia, de manera similar, son culpables quienes abandonan deberes de manera parcial con enemigos habituales, eso es trabajo y huída de dolores.
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Que alguien puede juzgar legítimamente quién, en este placer en particular, es realmente lo ideal, ya sea porque no hay molestias en absoluto, o porque aquel que sufre no sigue dónde llevará la voluptuosidad sin comprender consecuencias molestas.
Sin embargo, nosotros acusamos con verdad y justicia a aquellos que lideran con encanto los presentes voluptuosos y corruptos, aquellos dolores y molestias que, de alguna manera, siendo capaces de evitarse, no son proporcionados por la codicia, de manera similar, son culpables quienes abandonan deberes de manera parcial con enemigos habituales, eso es trabajo y huída de dolores.
Lorem ipsum dolor sit amet, consectetur adipisicing elit, sed do eiusmod tempor incididunt ut labore et dolore magna aliqua. Por supuesto, para nosotros, la capacidad de adherirse a la mínima cantidad de dolor para permitir que tengamos la oportunidad de realizar el trabajo y el dolor continuo es fundamental, todos los placeres deben ser asumidos, todo el dolor debe ser rechazado.
Nadie disfruta del placer en sí mismo, porque es difícil de evitar o de huir, sino que, por el contrario, trae consigo grandes dolores que las personas no saben seguir de manera razonable.
Y es notablemente sencillo y rápido distinguir entre estas cosas. En el tiempo libre, con la liberación de nuestras opciones, decidimos sin obstáculos lo menos posible lo que más nos gusta hacer, todas las formas de placer son aceptadas, todos los dolores son rechazados.
No se permite imitar. Excepto por el dolor no reclamado por los que regalan afecto, son culpables de abandonar su deber de actuar con celo si no disfrutan de una mente trabajadora.
Deseosamente observo de dónde proviene todo este error nacido mientras disfruto de la alegría acusatoria y laudable, la totalidad de la situación agradable, esa misma que el inventor de la verdad y casi arquitecto de las vidas bellas dicta son explicables.
Nadie realmente anhela el dolor en sí mismo, simplemente porque es dolor, porque a veces quieren experimentarlo para trabajar y sufrir una gran cantidad de placer. Por supuesto, para nosotros, la capacidad de adherirse a la mínima cantidad de dolor para permitir que tengamos la oportunidad de realizar el trabajo y el dolor continuo es fundamental, todos los placeres deben ser asumidos, todo el dolor debe ser rechazado.
Sin embargo, nosotros acusamos con veracidad y justicia a aquellos que lideran con encanto los voluptuosos presentes deleitados y corruptos, aquellos dolores y molestias que, de alguna manera, siendo capaces de evitarse, no son proporcionados por la codicia, de manera similar, son culpables quienes abandonan deberes de manera parcial con enemigos habituales, eso es trabajo y huída de dolores. Que alguien puede juzgar legítimamente quién, en este placer en particular, es realmente lo ideal, ya sea porque no hay molestias en absoluto, o porque aquel que sufre no sigue dónde llevará la voluptuosidad sin comprender consecuencias molestas.
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